Saturday, October 29, 2005

Pasarela de deberías


Pasarela de deberías


En algunas partes se está bombardeando una ciudad completa. Otras, ya han desaparecido por lo mismo. A cada momento en África mueren miles por no tener comida, mientras que muchos estamos gastando en vanidades y en lujo. Es la tenida que nos cubre: el deseo de omitir y embellecer lo que no se debe ocultar

Es tiempo de primavera-verano, y con ello el consecuente cambio de temporada hace que saquemos las pilchas del clóset, dándonos cuenta que tenemos que comprar algunos atuendos para renovarnos y “ser divinos” ante los ojos del mundo. Mientras las tiendas se enloquecen ofreciendo los avances de temporada me quedo mirando una que otra página de tonteras. La moda no me ciega sólo con la ropa; también me cautivó con el entretenido fotolog, el blogger y con el hostigante, pero melódico sonar del Messenger.

Debo reconocer que no me simpatiza del todo lo que algunos toman por moda. Es un estereotipo, porque no todos se visten así. Odio las remeras sin mangas, el magenta y el estilo “cargo” al por doquier. Además del extraño gusto por andar con todo apretado. Lo reconozco, no comparto los gustos en moda, aunque muero por tener cualquier cosa, da lo mismo que. Soy parte del medio.

¿Por qué estar de moda diciendo que somos metrosexuales en desarrollo, siendo que la verdad es que nos gusta estar arreglados y perfumados? Según nosotros mismos sí lo somos… ¿o no?

Sabemos que debemos tratar de ser normales, sabemos, como dice la Shakira, que debemos trabajar cada día para vivir en la vida y contestar sólo aquello y pensar sólo eso, para que Dios nos ampare de malos pensamientos. Escuchamos a las abuelas decir que “deberíamos usar esto”. Oímos el refunfuñar de los copuchentos cuando estamos mal vestidos, diciendo: “Debería usar algo más bacán”… Todo esto nos debe dejar en la puerta de una paradoja: ¿Debemos hacer nuestros deberes en base a los deberías?

Las grandes ciudades con sus desfiles apoteósicos reciben a las y los modelos más cotizados del mundo. De seguro miraré a esos cuerpos perfectos que pasarán mirando con cara de desprecio, camuflados en un nombre ganado en base a portados y méritos bastante poco útiles, pero méritos al fin y al cbao. Se encontrarán todos los cuerpos bellos en un sólo lugar, para que pajarones incrédulos como nosotros sigamos, inconscientemente quizás, a un cuerpo dionisiaco por sobre una pasarela eterna rumbo a la vanidad.

Miraremos camisas, pantalones y también esas poleras sin mangas que tanto detesto. Bajaremos la vista a ver excéntricos bordados en pantalones y pensaremos para nosotros mismos: “Debería comprarme un pantalón como ese”. Lamentablemente, volvemos a caer en el juego: ¿Debería cumplir mis deberes en función de un debería?

Ahora mejor hago algo más útil: Debería irme a comprar un pantalón con bordados inútiles, pero a la moda, mientras África sigue muriendo de hambre y yo; de vanidad.

2 comments:

Johnymepeino said...

Plas,plas,plas,plas.... Este post de hoy que nos has dejado debería ser de lectura obligada en todas las escuelas, como el catecismo.

P.D.- Ahora en españa se lleva el hombre übersexual. No,no hijo no, no me preguntes en qué consiste, no soporté la noticia y cambié de canal :D

Fernando Olmos said...

I can't take my eyes off of you